Harmony Workshop

Lección 26

Harmony Workshop

Una de las cosas que el mundo parece sugerirle a uno continuamente es que uno ya ha logrado todo lo que necesita y que todo es bastante fácil. En otras palabras, creemos que cuando hemos logrado un poco que ello es todo lo que hay que lograr. Sin embargo, el Reino del Espíritu significa riquezas incalculables que continúan revelándose a medida que uno trabaja. La idea del  trabajo, de hacer algo con el material que uno recibe, se enfatiza continuamente en toda la Enseñanza. En esta era de intelectualismo, somos bastante propensos a tomar alguna idea y porque “pensamos” en ella sentimos que la hemos entendido, que la hemos utilizado y que “sabemos” al respecto. Sin embargo, solo a medida que uno experimenta con algo, trabaja con ello, le dedica tiempo y esfuerzo y descubre por sí mismo su valor, hace algo que realmente vale la pena, que perdura, que ayuda al desarrollo del cuerpo espiritual y el crecimiento de ese cuerpo realmente se produce.

Leeremos una parábola. Es del Libro de Mateo, capitulo 25, comienza en el Versículo 14 y continúa hasta el versículo 30: “Porque es como un hombre que yéndose al extranjero, llamó a sus siervos y les entregó sus bienes. A uno le dio cinco talentos, a otro dos, y a otro uno, a cada uno conforme a su capacidad en particular, y luego se fue de viaje. Y el que había recibido los cinco talentos fue y negoció con ellos, y ganó cinco más. Asimismo, el que había recibido dos ganó dos más. Pero el que había recibido uno fue y cavó en la tierra, y escondió el dinero de su señor. Después de mucho tiempo vino el señor de aquellos siervos, y arregló cuentas con ellos. Y llegando el que había recibido cinco talentos, trajo otros cinco talentos, diciendo: Señor, cinco talentos me entregaste; aquí tienes, he ganado otros cinco talentos sobre ellos. Y su señor le dijo: Bien, buen siervo y fiel; sobre poco has sido fiel, sobre mucho te pondré. Entra en el gozo de tu señor. Llegando también el que había recibido dos talentos, dijo: Señor, dos talentos me entregaste; aquí tienes, he ganado otros dos talentos sobre ellos. Su señor le dijo: Bien, buen siervo y fiel; sobre poco has sido fiel, sobre mucho te pondré; entra en el gozo de tu señor. Pero llegando también el que había recibido un talento, dijo: Señor, te conocía que eres hombre duro, que siegas donde no sembraste y recoges donde no esparciste; por lo cual tuve miedo, y fui y escondí tu talento en la tierra; aquí tienes lo que es tuyo. Pero respondiendo su señor, le dijo: Siervo malvado y negligente, sabías que siego donde no sembré, y que recojo donde no esparcí. Por tanto, debías haber entregado mi dinero a los banqueros, y a mi regreso, al menos, hubiera recuperado lo que es mío con los intereses. Quitadle, pues, el talento, y dadlo al que tiene diez talentos. Porque al que tiene, le será dado, y tendrá en abundancia, y al que no tiene, aun lo que tiene le será quitado. Y al siervo inútil echadle en la oscuridad de afuera; donde habrá llanto y el crujir de dientes”.

Ahora, obviamente, esta historia es sobre algo que se le da a alguien, a tres personas diferentes, algo de valor, que un señor les dio a sus siervos, algo muy valioso para ver que harían con ello. Utilizó el símbolo del dinero. El dinero es algo que incluso el mundo considera valioso y que adquirirá cosas. Por lo que les dio de acuerdo a sus capacidades. Así que un hombre que había estado trabajando duro y tenía cierto grado de capacidad, a él le dio cinco talentos. Ahora veamos lo qué pueden ser estos talentos en relación con la Enseñanza y para el entendimiento del hombre y su propio crecimiento. En primer lugar, a todos se nos da la idea del AUTO-CONOCIMIENTO. Lo primero bajo esto es (1) La DESIDENTIFICACIÓN. Entonces diremos que eso es lo que recibió el hombre que recibió un talento. Recibió la idea de la DESIDENTIFICACIÓN DEL SER, ser consciente del ser (el yo) sin tratar de hacer algo en particular al respecto, sino simplemente ser consciente del ser (el yo).

El hombre que había recibido dos talentos, diremos, recibió la idea de (1) La DESIDENTIFICACIÓN y de (2) OBSERVAR LAS EMOCIONES DESAGRADABLES EN ACCIÓN y como se producen, como comienza el conflicto en el estado interior del hombre condicionado, entre A y B.

Diremos que al hombre que se le dieron cinco talentos no solo se le habló sobre el auto-conocimiento, sino que también se le dio la idea de (1) La DESIDENTIFICACIÓN. Se le dio la idea de (2) OBSERVAR LAS EMOCIONES DESAGRADABLES, el conflicto entre A y B. Debía (3) OBSERVAR LAS CUENTAS POR COBRAR que todos forjan contra todos los demás y generan una carga terrible que todos llevan. Se le dio la idea de (4) OBSERVAR LAS EXPECTATIVAS y ver que todos esperan el ideal y poder ver el Ciclo Vicioso. Y luego se le dio (5) OBSERVAR LA TENTACION. Ahora tiene cinco talentos, algo con lo que trabajar.

El hombre que recibió los cinco talentos trabajó con estas ideas que se le dieron. Las aplicó, las observó en acción, dedico tiempo en ellas y, por supuesto, lo que tenía se convirtió en algo que valía el doble para él porque ahora había experimentado. Él tenía las ideas y vio “el bien” de experimentar con estas ideas. Entonces había visto LO QUE ES y había visto el VALOR de lo que es. Por lo tanto, ahora tiene diez talentos. Asimismo, el hombre que recibió los dos talentos, los aplicó, trabajó con ellos, estudió, observó, tomó notas, ganó el doble, duplicó su valor porque a él se le dio algo que tiene valor. Lo aplicó y ahora valía el doble para él.

Pero el hombre que recibió un talento, observando que el Señor/Maestro no parecía tener ninguna ocupación a tiempo completo, por lo que pensó que tenía unos medios mágicos para adquirir sus necesidades. Sintió que era un hombre severo porque solo le dio un talento. Sin duda sintió que fue juzgado mal porque la vanidad y el orgullo se manifestaron y dijeron: “Deberías haber recibido más. Después de todo, eres tan bueno como estos otros tipos, tan capaz, tan maduro, has vivido tanto como ellos”. Pero, sin embargo, el señor parecía sentir que cada uno tenía cierta capacidad. Dice que les dio los talentos de acuerdo con sus varias habilidades. El que recibió un talento no trabajó con él. Lo enterró en la tierra; cavó un hoyo. En otras palabras, lo almacenó en el centro de inteligencia y podía traerlo a la memoria y recordarlo y repetirlo a la orden. Así que lo enterró. El no hizo nada con él en absoluto. No experimentó con él. Pero ahora lo recordaba y sabía exactamente cómo hacerlo, como recuperarlo y tenerlo a la mano de nuevo.

Entonces, un día, el señor regresó y revisó para ver lo que tenían. Así que el hombre que había recibido los cinco talentos demostró que había experimentado con ellos y que tenía algo dos veces más valioso. El señor le dijo: “Bien hecho, buen siervo y fiel”. Fiel significa que siguió trabajando, continuó. Se utiliza muchas veces de la misma manera que la palabra perseverar, continuar, independientemente de lo que sea, él lo sigue utilizando. A pesar de que ha entendido mucho, continúa utilizando los cinco talentos. El negoció con ellos, actuó sobre ellos, trabajo con ellos y tuvo cinco más. El señor lo elogió por ser un hombre fiel, un hombre que siguió trabajando. Y dijo que había sido fiel sobre estas pocas cosas, que podía entrar en el gozo del señor. En otras palabras, comenzó a experimentar las cosas reales. Comenzó a experimentar ser un hombre nuevo; experimentó el amor, el gozo del señor.

El segundo hombre que había recibido solo dos talentos, dos cosas, pero que había trabajado con ellos y se había aplicado diligentemente. Había experimentado, había observado, había hecho sus notas, y los había observado en acción, los había considerado valiosos, y había dedicado su tiempo en ellos y continuado, y había, por supuesto, cambiado sus dos talentos por cuatro. Tenía algo que valía el doble y fue elogiado por ser un buen siervo y fiel, y se le dijo que entrara en el gozo del señor.

Así que como ves, no es la cantidad de cosas que uno haga, porque mientras ponga en práctica cualquiera de las ideas de la Enseñanza, y realmente la aplique, la misma le abre todas las puertas de la misma manera. Uno puede trabajar con cinco cosas a la vez y algunos solo pueden trabajar con una cosa a la vez. Algunos pueden trabajar con dos cosas a la vez. Cada uno de nosotros tiene sus propias habilidades por separado, y siendo por separado, no hay dos personas iguales, somos perfectos tal y como somos en lo que respecta a la cantidad de habilidades que tengamos y al parecer tiene el mismo efecto.

Siguiendo la historia, parece que si el hombre que había recibido un talento hubiera obtenido dos del mismo, se le hubiera dicho que era un buen siervo y fiel y que entrara en el gozo del señor. Pero ves, era muy débil; por eso solo se le dio un talento. Solo podía manejar una cosa. Sus debilidades eran el orgullo y la vanidad. Ves, él había intentado crear una imagen de sí mismo como un hombre prudente que era capaz de juzgar al señor. Su vanidad se mostró allí, y además el defendió que lo que había que hacer era estar a salvo, por supuesto. Así que había escondido el dinero y lo había traído, recordó la idea y dijo: “Aquí está”. Pero no había trabajado con ella; no había experimentado con ella. Por lo tanto, solo disponía de la idea. El señor no fue muy amable con el, ¿verdad? Dijo que era un siervo malvado y negligente, era perezoso. Era malvado porque su estado interior estaba lleno de orgullo y vanidad y posiblemente de avaricia y envidia porque los demás habían recibido más. En cualquier caso, no había hecho nada más que enterrarla en la tierra; la había almacenado en el centro de memoria. Pudo recordarla y decir: “Aquí está, todavía recuerdo esta idea”. Pero no había trabajado en ella, por lo que no había aumentado su valor dentro de él. No se había encargado de aplicarla para construir una base firme sobre su propia experimentación. Fue llamado un siervo malvado y negligente, y el señor dijo: “Quitadle, pues, incluso lo que tenía, y dadlo al que tiene diez”.                

Así que quizá el que tiene diez recibió una idea, la que a este hombre se le había dado, con la que el otro ni siquiera había realmente trabajado aún. Pero se puede asegurar que el hombre que trabajó con la idea comenzó a hacerlo en lo que fuera que el otro tenía — el que solo tenía un talento. Tomó ese talento y comenzó a trabajar con él también. Posiblemente, fue comenzar a observar el orgullo, la vanidad y la avaricia dentro del ser (el yo). Aparentemente eso es lo que el hombre requería, y el señor era el que podía reconocer sus varias habilidades, así que este era en el que más podía trabajar, si lo hacía. Por lo que perdió incluso lo que tenía y dijo: “Echadlo en la oscuridad de afuera”. Eso significa que fue echado de la escuela. 

Ahora, en la existencia real de cada día el hombre mismo se echó de la Escuela porque no la utilizó. Así que comenzó a perder hasta las ideas porque las ideas no permanecerán con uno a menos que uno vea el valor de experimentar con ellas. Uno ve las ideas, las puede leer, las puede escuchar, las puede oír una y otra vez, las puede repetir cada vez que uno lo desee. Uno las puede desenterrar y repetir o citar la idea y puede utilizarla como una especie de eslogan en algún lugar, pero todo ello es simplemente enterrarla en la tierra. No está experimentando con ella, no la está poniendo en práctica, no le está poniendo el valor, no la está viendo como algo valioso que puede incrementarse en valor mediante la aplicación, que es ser un buen siervo y fiel, uno que la toma y trabaja con ella. Ves, mediante el hecho de ser un siervo, uno sirve a algo, uno sirve a X primero siendo un observador objetivo del ser (el yo), observando a A y B y mamón y sus continuos esfuerzos por controlar y hacerse cargo de la casa. Por lo tanto, uno primero sirve a X siendo consciente. En segundo lugar, uno sirve a X sirviendo a la Enseñanza, valorándola, poniéndola en práctica, porque entonces uno está aumentando el valor de la Enseñanza, los talentos que están cerca. De lo contrario, simplemente permanecen como el hombre que tenía uno; lo entierra en la tierra y no trabaja en ello.

Lo otro es que el hombre trabaja para la Vida en su totalidad y sirve a la Vida cada vez que evoluciona, ya que la naturaleza de la vida es que nazca un hombre nuevo. El hombre tal como nace en la tierra es materia prima para el Reino de los Cielos, no para mamón. Por lo que uno tiene tres niveles de trabajo que uno haría. Uno actuaría al respecto porque uno ve el valor del mismo y los diversos aspectos de la vida. Uno ve los diversos materiales como valiosos. La Enseñanza es valiosa y además uno la ve como talento. Un talento era una moneda de oro que valía, en moneda actual inflada, unos 90 dólares. Así que a un hombre se le dieron 450 si estuviéramos hablando de dinero literal, pero no, estamos hablando de algo de valor, un poco de Enseñanza. La valoraron, la aplicaron, la pusieron en práctica. Pero el único hombre que no la utilizó, por supuesto, pronto perdió cualquier sentido del trabajo. Pronto perdió el hecho de ver algún valor en la información que había recibido porque no la aplicó, por lo que no pudo experimentar su valor. Su valor se duplicaría si experimentara con ella, pero si uno no experimenta con ella, pronto se pierde o le será quitada.

Por lo tanto, en la parábola dice que le fue quitada. En realidad, uno la pierde y uno ya no está en la Escuela a pesar de que uno tenga todo tipo de libros sobre el tema, a pesar de que uno tenga todo tipo de material disponible para uno. Si uno no lo aplica y hace las diversas cosas que se sugieren que uno haga con el trabajo: tomar notas, observarlo, ponerlo en acción, hasta que se convierta en algo valioso, uno vea el valor del mismo – entonces uno se echa fuera de la Escuela, uno fuera de la Escuela, fuera del área donde hay información. Uno es echado en la oscuridad de afuera donde hay llanto y el crujir de dientes. Ahora, no es tan difícil de entender lo que es. Uno no está hablando de algún hoyo debajo de la tierra o de algún lugar mítico llamado “infierno”. Uno está hablando del mundo, el mundo de las cuatro ideas, las ideas de los ideales, la auto-superación, las señales y las maravillas, y culpar.

Por lo tanto, hay oscuridad. Uno no ve valor alguno. Uno está luchando hacia una ilusión, que es un sueño, y en un sueño, uno no está viendo lo que está alrededor de uno. Uno está viendo una imagen en el sueño de uno, el ideal. Luego, por supuesto, está el crujir de dientes, porque cuando hay culpa, ¿qué sucede? El crujir de dientes se utiliza como un símbolo de contención entre las personas. Si alguna vez has estado cerca de ciertos tipos de animales de granja o animales salvajes, sabes que cuando sienten que algo ha interferido con ellos, es culpable de que no estén perturbados, comienzan a crujir los dientes, que indica: “Yo te morderé”. Así que, por supuesto, cuando culpamos a alguien tenemos la idea de “morderlos”, causarles dolor de alguna forma u otra para que paguen la cuenta que acabamos de establecer contra ellos.

Por supuesto, cuando lo hacemos estamos en la oscuridad de afuera donde hay llanto y el crujir de dientes porque cada vez que uno siente que no ha recibido lo debido, o que ha fallado en lograr el ideal, uno se desilusiona, lo cual se llama “llorar”. Por supuesto, algunos literalmente lo hacen. Es su forma de quejarse, lo que se supone que hará que se salgan con la suya. Si alguien está llorando, por lo general, alguien se incomoda porque el llanto, por lo general, tiende a hacer que otras personas se sientan culpables, aquellas que están condicionadas a su alrededor, por lo tanto, donde hay llanto y el crujir de dientes. Vemos que hay más y más razones por las que siempre ha existido, que la Enseñanza por si misma se puede quitar o perder si no se utiliza. Pero cuando se utiliza se duplica su valor o, posiblemente, muchas veces aumenta de valor. En algún otro lugar dice: treinta veces, sesenta veces, cien veces, pero al menos se duplica su valor porque hemos visto la verdad al respecto. Hemos visto los hechos involucrados y hemos experimentado con ellos y encontrado el valor de los mismos.

Por lo tanto, en este esfuerzo particular de aplicar, escribamos, en una hoja de papel, las ideas de la Enseñanza con las que he trabajado esta semana y trabajemos con varias ideas. Se nos han dado por lo menos cinco talentos y posiblemente algunos más.

Tenemos la idea del AUTO-CONOCIMIENTO, ser conscientes del ser (el yo) como objeto. Nos hemos encargado de DESIDENTIFICARNOS de él, que Yo observe el ser (el yo), Juan o María, que YO OBSERVE LAS EMOCIONES DESAGRADABLES y cómo surgen como un conflicto entre A y B, cada uno diciendo que esta es la manera de ganar el ideal, para servir a mamón.

Tenemos que OBSERVAR, también, las CUENTAS POR COBRAR que se han sumado contra todas aquellas personas a las que uno culpaba cuando uno no lograba el ideal. A medida que observamos esto, podemos observar cuando surge en el ser (el yo), que si lo hemos visto realmente o si lo estamos observando en todas las personas con las que podríamos estar en contacto en nuestras actividades diarias. A lo largo de la semana veremos personas construyendo cuentas por cobrar. Verlo en otra parte no es culpar o justificar, sino ser más conscientes de lo que ocurre en el mundo.

Es SER MÁS CONSCIENTES DE LAS RELACIONES [entre cosas, acontecimientos, personas, etc.], que es surgir a un estado de ser llamado el artista y el comienzo de la conciencia objetiva.

Además ES SER CONSCIENTES DE LA CONSIDERACIÓN INTERIOR, si uno está considerando como se sienten otras personas, como les va a otras personas, como se les puede abordar, lo cual es uno de los aspectos del ágape o el amor. Considerar, pensar, mirar desde el punto de vista del otro para entenderlos y sus comunicaciones, o si uno podría estar considerando, “¿Qué hay en esto para mí? ¿Cómo me pasó esto a mí? ¿Por qué me pasó esto a mí?” 

Y uno podría observar EL CICLO DE LAS EXPECTATIVAS en el que todo se basa en una expectativa. Observaremos todo esto no solo en el ser (el yo), sino también en todas las demás personas con las que tenemos contacto. Nos da un punto de vista mucho más amplio. Comenzamos a ver las relaciones entre los trastornos de las personas y sus expectativas.

Además podríamos comenzar a OBSERVAR LA TENTACION. Y ello definitivamente podemos observarlo en el ser (el yo) porque nunca estamos bastante lejos. Siempre mamón está trabajando y lo escuchamos de mil maneras. Así que podríamos observar como trabajamos al respecto y lo que vemos de ello.

Ciertamente podemos observar los tres motores de vapor poderosos de mamón, que el utiliza o sus motores a reacción: LA VANIDAD, EL ORGULLO Y LA AVARICIA. 

Al mismo tiempo, podríamos OBSERVAR que tipos de IDEALES escuchamos. Podríamos observar los ideales cuando vemos que a veces se nos sugieren y vemos a otras personas totalmente identificadas con un ideal. 

Comenzamos a entender el mundo en el que vive el hombre. A medida que uno observa esto, se familiariza más con ello, toma algunas notas al respecto y ve la relación [entre cosas, acontecimientos, personas, etc.], esto significa trabajar con las ideas. Esto hace que sea mucho más posible que uno sea capaz de ayudar a la gran cantidad de personas que uno ve que cuestionan. Sin tomar conciencia de esto de todos los sectores de la vida, no solo de dentro, sino también de todos aquellos que nos rodean, uno realmente no sabe cómo trabajar con las personas que vienen preguntando, y están empezando a hacerlo. Si uno no sabe cómo hacerlo, si uno no está trabajando con ello, uno retrocederá como el hombre que tenía un talento; sacándolo de la tierra, repitiéndolo como un montón de palabras. Y eso realmente suena hueco porque no tiene el doble valor de haberlo aplicado.

Como ves, una persona suena completamente diferente cuando él está citando algo que no entiende y cuando él está trabajando con algo que él o ella ha experimentado por sí mismo/a. Primero, tintinea con valor como una pieza fina de oro o plata o un cristal hermoso, tintinea. Pero cuando uno no lo ha experimentado, solo ha pronunciado las palabras, suena aburrido como el plomo, metal babbit, es entonces metal base.

Uno de los grandes esfuerzos a lo largo de los siglos ha sido convertir el metal base en oro. La única forma en que el metal base puede convertirse en oro es trabajando con él. Por supuesto, los alquimistas tenían una fórmula larga y complicada, pero como ves, de lo único que se trataba esa fórmula era que el hombre trabajara con ella. Así que podemos trabajar con una idea que aún es plomo hasta que experimentemos con ella y luego se convierte en oro.

Esto, por supuesto, es la historia de los talentos, aumentando de valor de cinco a diez, de dos a cuatro, y uno que no se utilizó y se quedó plomo.

Derechos de autor © 1973-2021 de Rhondell. Reservados todos los derechos. Este material es para uso personal de un estudiante individual; no debe ser duplicado ni prestado a otro.